De todo un poco y de nada mucho


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9/11/07

LA OBSESIONADA CHICA PASTICHE

A veces me atacan obsesiones con determinadas cosas o personas que son más fuertes de lo que puedo controlar. Bueno... de hecho esa es la definición de una obsesión, no?
Hummm... la verdad que no lo sé exactamente, veamos (wikipedia)
Obsesión - "idea, deseo o imagen que aparecen de forma reiterada y persistente y que el sujeto no puede alejar voluntariamente de la conciencia. Tiene un carácter compulsivo y adquiere una condición penosa y angustiante"
Si, eso es, compulsivo y persistente.
Así me ataca a mi a veces.
Tuve una época de cholulismo total donde me fanatizaba con algunos actores, en especial Michael J.Fox (áún no tenía parkinson), Bill Pullman (me mató cómo salvó a la vida humana de los extraterrestres) y no recuerdo quién más... pero me agarraba tal obsesión que recortaba cada anuncio y cada foto que saliera publicado en revistas, diarios, etc. Llegué a recortar secretamente las revistas de la sala de espera de mi dentista. Me tomaba mi tiempo para hacer la tarea correctamente y con el menor ruido de papel posible, para no levantar sospechas. La cosa se complicaba cuando en la sala de espera había alguien más esperando, y tenía que discimular, cortar de a poquito, mirando para otro lado y haciéndome la "quién, yo?". Las revistas quedaban llenas de huecos pero eso no me preocupaba porque nadie culparía a una chica con cara de angelito (esa era yo).
Después, un poco más grande, me agarré una obsesión con un chico real. Ahora que lo pienso no es ni siquiera gracioso, es más bien preocupante. Pero bueno, nadie tiene derecho a juzgarme, así que les cuento: siempre me las ingeniaba para cruzármelo. Tenía sus horarios de recreo controladísimos, cosa de pedir para ir al baño y cruzarlo en el pasillo cuando él salía al recreo (teníamos recreos a diferentes horas). Sabía todo de su vida y llegué a festejarle su cumpleaños en secreto con mis amigas. Le sacaba fotos a escondidas y lo perseguía en las fiestas donde coincidiéramos. Sabía de memoria su teléfono, el nombre de su hermana y de sus padres. Era tan tímida que nunca se percató de mi existencia. Que triste...
Bueno, pero eso todo pasó, y mis obsesiones fueron cambiando con el tiempo. Me obsesioné con grupos de música (nacional o importada), me obsesioné con algún color en particular, me obsesioné con un libro o con una canción determinada. Tuve tiempos de obsesionarme con seriales de tv, con el inglés, con los plátanos, con los girasoles, los san antonios, el helado de chocolate, el maquillaje, los perfumes, la literatura intelectual, los poemas, los sudokus, las miniaturas de panadería, los capuccinos, coleccionar posters de video club (quién no lo hizo alguna vez), y así puedo seguir con la lista.
Actualmente me obsesioné con californication como habrán podido observar en el blog, y también con soda stereo.
Ya aprendí que lo único que puedo hacer contra una obsesión es encontrar otra obsesión. Así que ahora estoy buscando alguna otra cosa con la cual obsesionarme...
HEY ! ESCRIBIR EN EL BLOG ! ESA ES UNA BUENA OBSESIÓN PARA SEGUIR DESARROLLANDO.
Hasta que encuentre otra más entretenida...

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